Sé que eres fiel a tu
paso.
Sé que no tienes
freno.
Sé que, una vez
empiezas, solo puedo pararte entrando en el fuego.
No espero que sigas
mi ritmo.
No quiero que
retrocedas por mí.
No pido que detengas
el seísmo.
Solo pido que guardes
algo para mí.
Guarda su imagen, su
voz y su perfume favorito.
Esconde bien los
buenos momentos para que no se pierdan.
Protege las risas,
los llantos y las canciones antes de dormir.
Haz lo que quieras conmigo,
pero sálvalos a ellos.